Y llegó con todas sus desgracias: Haití, Chile, Isla de Madeira, Río de Janeiro y más.
Y yo que siempre me lamenté por el desequilibrio del mundo cuando está ordenado, sufrí una profunda tristeza.
Supongo que ahora es cuando más falta hace saber el secreto de la felicidad, y que los que pueden obtenerla lo hagan y que ellos mismos, juntos, colaboren para que los que no pueden por fin la obtengan.
Todos tenemos derecho a ser felices y es algo que nos negamos a aceptar.
Tan sólo hay que dejarse llevar por ella.
Y si piensas que no la tienes piensa en ellos y no serás feliz, piensa en ti y no serás feliz y piensa en ti haciéndoles felices y, créeme, lo serás.
Porque somos mucho más que nuestro universo personal.
Hay tantas cosas por conocer...
Y yo que siempre me lamenté por el desequilibrio del mundo cuando está ordenado, sufrí una profunda tristeza.
Supongo que ahora es cuando más falta hace saber el secreto de la felicidad, y que los que pueden obtenerla lo hagan y que ellos mismos, juntos, colaboren para que los que no pueden por fin la obtengan.
Todos tenemos derecho a ser felices y es algo que nos negamos a aceptar.
Tan sólo hay que dejarse llevar por ella.
Y si piensas que no la tienes piensa en ellos y no serás feliz, piensa en ti y no serás feliz y piensa en ti haciéndoles felices y, créeme, lo serás.
Porque somos mucho más que nuestro universo personal.
Hay tantas cosas por conocer...
No hay comentarios:
Publicar un comentario